Alcázar de Còrdoba.
Campo de los Santos Mártires.
BOABDIL, ABU ABDALÁ.
Soberbio alcázar de teñida púrpura.
En su inefable patio laberíntico
sangró el viril canto de despedida
de Abu Abdalá.
Sin embargo, una plañidera estéril
de querencia para un Rey Chico que huye
fue manuscrita
por la vértebra de su ensortijada
amante esposa,
la última sultana, la Moraima.
Se descompuso en cúbicos exhortos,
por la ciudad sin aire, trashumante,
el fiel lamento
derrumbado ante el Dios de los Católicos,
que es su mismísimo e insobornable
Juez arribeño de las rendiciones.
7 comentarios:
Borges pasó por mi mente al leer esto.
He vuelto.
Estoy consternado porque me perdí el show de Hillary Krishtina Fernández más Fernández De Kirchnez
En realidad lo que si siento es que me perdí lo de Podeti.
Usted fué Sra.?
No, no pude ir.
La próxima prometo.
El miércoles salgo por una semana.
Dejo los blogs de clarin.com en tus manos.
Bueno me pondré al día con lo que escribiste en la semana que YO no estuve.
Lucía, concuerdo con Vill, hay algo de la impronta borgeana. Pero ojo, que solo en cuanto a temática, el talento es todo tuyo.
Permiso
Linda poesia.
Los que te conocemos sabemos de que estas hablando y no nos gusta
gracias, martín.
Leé si podés lo que mandé al blog electoral.
(Podemos debatirlo con cierto respeto si no coincidís en mis apreciaciones).
Si no sale publicado te indico otros sitios donde lo colgué para que lo leas o te lo paso en pri.
Los que me conocen saben de que estoy hablando y no les gusta...
jajajajajajajajajajaja
(ocho besos para vos anónimo)
Para impedirme decir lo que digo tendrás que presentarte personalmente y explicarme todos los motivos.
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